Tengo tantas, tantas ganas

Tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que esta vez no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no dejaré de luchar

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no podré hacerlo más

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que debo luchar

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que hoy no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que nadie más que yo


puede tener

tantas, tantas ganas

de querer sacarte de en-cima
de querer sacarte de encima


tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que nadie más que yo

puede tener

tantas, tantas ganas

de luchar

y encontrar (me) en todos aquellos futuros que vendrán, en todas esas incertidumbres momentáneas que oscilan en mi cuerpo, en mis manos, en mis dedos


tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que debo esperar

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no es necesario aguantar

tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que quiero volver

a tener ganas

de abrazarte

cuando esos encuentros sean momentáneos

cuando esos encuentros sean no-deseados

cuando esos encuentros casuales sean deshechos por la llegada de la luz a nuestros cuerpos y nos descubran besándonos sobre una banca en una plaza cualquiera, cubiertos de aquel olor a cigarro que nos mantuvo llorando toda la noche


tengo tantas, tantas ganas
pero me dije que no importa

tengo tantas, tantas ganas
pero...

tengo tantas, tantas ganas
que lo haré